Un agresor abrió fuego cerca de Ashdod, provocando la muerte de un oficial de policía y dejando a otras cuatro personas heridas antes de ser abatido por un civil armado.

Un trágico ataque terrorista sacudió la autopista 4, en las cercanías de Ashdod, Israel, la mañana de hoy. Un hombre armado disparó indiscriminadamente a los transeúntes, matando a un oficial de policía y dejando a cuatro personas más heridas, entre ellos un médico que prestaba auxilio en el lugar. El agresor fue abatido por un civil armado, quien intervino en medio del caos.

De acuerdo con el Hospital Universitario Samson Assuta, el policía fue gravemente herido en el ataque y falleció mientras era trasladado al hospital. Otros heridos, entre ellos un hombre de 37 años que recibió un disparo en el muslo, fueron llevados a diferentes centros médicos, donde reciben atención de urgencia. El personal médico de United Hatzalah y Magen David Adom llegó rápidamente al lugar, brindando asistencia inmediata a las víctimas.

El ataque comenzó cuando el agresor, aún no identificado, se aproximó a la autopista a pie y, sin mediar palabra, abrió fuego contra los civiles y el oficial de policía. Según fuentes oficiales, el atacante disparó al agente antes de ser neutralizado por un civil armado que se encontraba en la zona. Este ciudadano había obtenido su arma recientemente, como parte de la reforma de seguridad promovida por el Ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir.

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Los testigos describen el momento como un acto de violencia repentino y brutal. Avner Ben David, técnico de emergencias médicas, relató que, al llegar al lugar, encontraron a un hombre de 30 años gravemente herido en el suelo, lo que motivó maniobras de reanimación inmediatas. “La situación era crítica, trabajamos sin descanso para intentar salvar vidas”, comentó el paramédico.

El ataque ha provocado un despliegue masivo de las fuerzas de seguridad en la zona. Las autoridades locales trabajan en la investigación del incidente y en la búsqueda de cualquier indicio que sugiera la posibilidad de más involucrados en el ataque, aunque por el momento no se ha encontrado evidencia de otros agresores.

Este hecho subraya la continua vulnerabilidad de Israel frente a ataques terroristas, resaltando la importancia de la rápida respuesta de los equipos de emergencia y la coordinación de las fuerzas de seguridad para evitar una tragedia aún mayor. Mientras tanto, la comunidad permanece en alerta, y el debate sobre la seguridad y el control de armas en el país vuelve a estar en el centro de la discusión.