El deterioro cognitivo relacionado con la edad es una preocupación creciente en todo el mundo. Sin embargo, estudios recientes han identificado cuatro cambios clave en el estilo de vida o hábitos que pueden rejuvenecer el cerebro y prevenir el declive mental.
Cambios en el estilo de vida que rejuvenecen el cerebro
El Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas representan uno de los mayores retos de la salud pública a nivel mundial. Sin embargo, la ciencia ha identificado cuatro cambios en nuestro estilo de vida que pueden ayudar a prevenir el deterioro cognitivo y mantener el cerebro en buen estado, funcionando de manera óptima por más tiempo.
El ensayo clínico, liderado por el doctor Dean Ornish y su equipo del Instituto de Investigación de Medicina Preventiva, en EE. UU., se sostiene que los cambios simples en el estilo de vida, como la forma de responder al estrés, ejercicios y nuestra alimentación, a menudo revierten la progresión de las enfermedades crónicas más comunes y costosas.
Incluso, señaló que vivir sin tantos fármacos, logran mejoras cognitivas y funcionales en personas con diagnóstico de Alzheimer en etapa temprana o deterioro cognitivo leve. Pero no solo el estudio de Ornish respalda el beneficio de cambiar nuestros hábitos a unos más saludables, sino también los datos publicados en la revista The Lancet, que determina que el 45% de los casos de demencia podrían evitarse si se identifican y controlan los factores de riesgo a lo largo de la vida.
¿Qué hábitos debes mejorar para mejorar tu salud?
A continuación, te presentamos cuatro cambios en el estilo de vida respaldados por estudios científicos que pueden rejuvenecer tu mente y prevenir el declive cognitivo:
- Alimentación saludable y equilibrada: Dieta rica en frutas, verduras, grasas saludables (como las contenidas en el pescado azul, aceite de oliva y nueces) y baja en alimentos procesados y azúcares refinados ha demostrado proteger las células cerebrales. La dieta mediterránea, por ejemplo, está asociada con mejor memoria y menor deterioro cognitivo.
- Ejercicio físico frecuente: Las actividades aeróbicas, como caminar, nadar o montar bicicleta, aumenta el flujo sanguíneo cerebral y promueve la producción de nuevas neuronas. Investigaciones indican que las personas activas tienen menor riesgo de sufrir enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
- Vínculos sociales y apoyo emocional: unirse a grupos de apoyo o pasar tiempo de calidad con amigos y familiares.
- Gestión del estrés: El médico psiquiatra y neurólogo Enrique De Rosa, explicó a 'Infobae' que diversos estudios señalan que el estrés sostenido se asocia tanto a trastornos físicos como psicológicos, así como al riesgo de envejecimiento prematuro y mayor susceptibilidad a enfermedades relacionadas con la edad.
Por ello, se recomienda establecer rutinas de descanso, mantener una vida social activa y evitar la sobrecarga laboral. Incluso se puede aplicar técnicas como la meditación, la respiración profunda y el mindfulness para mejorar la neuroplasticidad, favorecer la concentración y la memoria, y reducir la inflamación cerebral.
Evita el deterioro cognitivo
Adoptar estos hábitos saludables no garantiza la prevención total del Alzheimer, pero sí puede retrasar su aparición y mejorar la calidad de vida cognitiva. La clave está en la constancia y el cuidado integral del cerebro a lo largo del tiempo.
De esta manera, se reveló que los cambios intensivos en el estilo de vida pueden reducir los síntomas del deterioro cognitivo y de la enfermedad de Alzheimer en etapa inicial, según la ciencia.