Se informó que siete sospechosos fueron arrestados por el asesinato de los 9 trabajadores en la mina Poderosa en Pataz, no obstante, resultó ser una acusación errónea y tuvieron que retractarse
Casi una semana después de la masacre que se cobró la vida de nueve trabajadores en la mina Poderosa en Pataz, se descubre que los siete detenidos por la Policía Nacional del Perú (PNP) en relación con el crimen no tienen ninguna conexión con los asesinatos. Al parecer, los arrestos se llevaron a cabo en una barbería debido a la posesión ilegal de armas de fuego y municiones.
En una entrevista con RPP, el general Víctor Zanabria, jefe de la Dirección de Orden y Seguridad, admitió que las detenciones realizadas se refieren únicamente a acusaciones de posesión de armas ilegales, sin estar vinculadas al homicidio múltiple en la mina de La Libertad.
Durante una audiencia el 5 de diciembre, la Fiscalía Mixta Corporativa de Pataz tuvo que aclarar que los siete sospechosos no tienen vínculos con la masacre, a pesar de que el Poder Judicial había anunciado en sus redes sociales que los arrestados serían procesados por el homicidio de los trabajadores mineros.
#LOÚLTIMO Juzgado de Investigación Preparatoria de Tayabamba de La Libertad programa para mañana, a las 14:30, la audiencia de prisión preventiva contra 7 personas por el asalto y homicidio de 9 trabajadores de la mina La Poderosa, en Pataz pic.twitter.com/TzPqfhRFkd
— Poder Judicial Perú (@Poder_Judicial_) December 4, 2023
Hasta el momento, no hay avances notables en la búsqueda de los responsables de las muertes en la mina de la provincia de la región de La Libertad. El reconocimiento de información incorrecta por parte de las autoridades complica aún más la búsqueda de justicia para las víctimas y sus familias.
El general Zanabria admitió haber entregado información no verificada al ministro del Interior, Víctor Torres, quien había anunciado previamente la detención de los supuestos responsables.
Falsa acusación: Detenidos no pertenecían a “La Gota Norteña”
El teniente Luis Oscco Ayala, comisario de Chagual, informó el 2 de diciembre a las 7:00 p.m. sobre la detención de individuos armados, incluidos dos ciudadanos venezolanos. Fueron erróneamente acusados de pertenecer a la agrupación criminal ‘La Gota Norteña’, desencadenando una serie de informes incorrectos sobre su identidad y actividades delictivas.
De acuerdo con La República, el error llevó al jefe de la III Macro Región Policial La Libertad, coronel Francisco Vargas Andonaire, a comunicarse con el fiscal adjunto provincial de Pataz, Lionel Altamirano. Este incidente destaca la importancia de verificar cuidadosamente la información en operativos policiales para evitar la difusión de datos incorrectos.
Como respuesta a los sucesos, el ministro del Interior, Víctor Torres, anunció la creación de una nueva base policial en Chagual, sin hacer mención explícita a la confusión generada. Esta base estará compuesta por personal de diversas unidades con el fin de reforzar la presencia y capacidad operativa de las autoridades en la región.
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Seguirán investigando
La confusión inicial surgió debido a informes sobre “gente armada” en la zona, lo que inicialmente se asoció con el incidente en la mina Poderosa en Pataz. Sin embargo, a medida que avanza la investigación, esta conexión se ha deshecho. Zanabria reconoció que el error se originó por un juicio inicial y destacó la necesidad de pruebas adicionales para establecer cualquier vínculo entre los detenidos y la violencia en el lugar.
“No solo es tener las armas, se tiene que vincular a los detenidos con la situación que se ha dado. Tiene que hacerse la absorción atómica para ver si dispararon, el manejo del arma y comprobar que ellos estuvieron en el lugar de la balacera y eso con el paso del tiempo se ha determinado que no ha sido así y por eso esta distorsión”, recalcó el general.
También señaló que, aunque no se han realizado arrestos directamente relacionados con la masacre violenta, se ha desplegado un equipo especial de investigación de homicidios, reforzado con 150 efectivos. Su objetivo es llevar a cabo operativos específicos para proceder con la detención de los responsables.