Amazon no es más la empresa que impulsa el teletrabajo y ha emprendido un riguroso proceso para lograr que todos los empleados cumplan, por lo menos, con 3 días presenciales de trabajo en la semana.
Para ello, ha empezado a rastrear a cada uno de ellos, contando los números de días que va a las oficinas y pidiéndole que cumplan la cuota a través de correos administrativos.
Así está el panorama
Según el Financial Times, se notificó a varios empleados de Amazon que "actualmente no cumplían con nuestras expectativas de unirse a sus colegas en la oficina al menos tres días a la semana".
“Esperamos que comience a venir a la oficina tres o más días a la semana ahora”, sentencian los mensajes.
Sin embargo, los destinatarios han reclamado que ellos sí cumplían la cuota mínima exigida durante los últimos meses. Amazon ha señalado que el correo está destinado al personal que “no había tenido un promedio de tres días a la semana durante las últimas 5 a 8 semanas”, y “cualquier persona interesada debería hablar con Recursos Humanos” para aclarar su registro de asistencia.
La situación está perjudicando a los trabajadores, quienes ahora deberán tener que mudarse de casa para cumplir con esta cuota semanal. Según los reportes, muchos de ellos habían elegido vivir en lugares más “tranquilos” y alejados de la ciudad gracias al trabajo remoto.
Muchos otros fueron contratados en medio o después de la pandemia, lo que significa que solo se han acostumbrado a un entorno de trabajo remoto o híbrido.
Un portavoz de Amazon dijo que la compañía aún no ha decidido quién tendrá que mudarse más cerca de una oficina, ni cuántos trabajadores se verán afectados por el mandato de la oficina. “Hay más energía, colaboración y conexiones desde que trabajamos juntos al menos tres días a la semana, y hemos escuchado esto de muchos empleados y las empresas que rodean nuestras oficinas", refiere.
No es la única ni la última
Amazon está lejos de ser el único en cambiar las prioridades de regreso al trabajo en la oficina. Meta anunció recientemente que los empleados deben acudir a la oficina tres días a la semana a partir de septiembre, en un marcado cambio con respecto a las políticas anteriores de la empresa que adoptaron el modelo híbrido.
Sin embargo, a diferencia de los planes de Amazon, el personal que fue contratado a distancia no se verá afectado por las nuevas reglas.
Según se informa, un memorando interno decía que "las expectativas más firmes en persona serán un cambio para algunos y requerirán compensaciones", antes de agregar que el trabajo en la oficina "apoya la colaboración y la energía que proviene de trabajar junto a su equipo, que son fundamentales como construimos el futuro”.