Alemania implementará un nuevo esquema que permite reducir la semana laboral a cuatro días. La medida duraría seis meses y busca aumentar la productividad de los trabajadores.
El periodo de prueba permitirá a los empleados de 45 empresas de toda la nación europea cumplir con sus obligaciones laborales un día menos a la semana, pero sin reducir su salario.
La iniciativa cuenta con la colaboración de la organización sin ánimo de lucro'4 Day Week Global' (4DWG) y está dirigida por la consultora de gestión berlinesa 'Intraprenör'. Según se detalló, solo participan compañías cuyo trabajo puede adaptarse a una semana laboral más corta.
Propósito
El objetivo de la polémica medida es reducir la escasez crónica de la mano de obra en Alemania. Y es que la Cámara de Comercio e Industria (DIHK),en noviembre, señaló que la mitad de las compañías tenían dificultades para cubrir vacantes provocando que el país pierda más de 90 mil millones de euros.
Los defensores de la medida sostienen que esperan que la semana laboral sea más corta para los trabajadores puedan asistir a sus centros de trabajo más felices y productivos. Esto en medio de un escenario en el que Alemania debe de afrontar un menor crecimiento de la productividad y escasez de mano de obra.
La encuesta de Forsa reveló que el 70% de los ciudadanos les gustaría trabajar únicamente cuatro días a la semana, mientras que el empresariado respalda de la moción. Además, esta medida podría persuadir a aquellos que no están dispuestos a trabajar una semana completa a unirse a la fuerza laboral, ayudando así a combatir la escasez de mano de obra que afecta a los países industrializados en todo el mundo.
Ventajas de la reducción
El proyecto piloto en Valencia, junto con otros ensayos llevados a cabo en todo el mundo por la iniciativa 4 Day Week Global, señalan mejoras en la productividad.
Además, facilita una mejor conciliación entre la vida laboral y personal para atraer y retener talento, promueve la salud de los empleados al reducir las bajas médicas y el ausentismo, y estimula el consumo en actividades de ocio, comercio y deporte. Estas son precisamente las medidas que Alemania requeriría en la próxima década.
De esta manera, se dio cuenta de que Alemania reducirá su semana laboral a 4 días con la finalidad de incrementar la productividad de sus trabajadores. La medida se da en medio de una situación de escasez de mano de obra.