Durante la pandemia, hasta hace tres meses, se han atendido en el hospital Sabogal de EsSalud más de 250 pacientes con úlceras por presión o escaras que fueron tratadas a tiempo, la inmovilidad en las personas de la tercera edad, pueden presentar estos casos por falta de actividad física. Así lo informa la Agencia de Noticias Andina.
Los adultos mayores son más propensos a presentar úlceras por presión o escaras, las que puede complicarse si la persona tiene alguna discapacidad o dificultad para movilizarse, debido a que el flujo sanguíneo disminuye y el tejido muere. De no tratarse a tiempo pueden generar una infección generalizada, afectando los músculos o incluso los huesos.
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“Estos casos se presentan con mayor prevalencia en adultos mayores y más aún si presentan un mayor grado de discapacidad o dependencia, entre ellos quienes presentan derrame cerebral, artritis severa o problemas oncológicos, están desnutridos, presentan obesidad mórbida, entre otros”, manifestó el doctor César Villacrés, médico geriatra del hospital Alberto Sabogal y vocero de EsSalud.
En el marco del Día Mundial de la Prevención de las Úlceras por Presión (UPP),el experto aconsejó, hacer una evaluación diaria de la persona en cama o en la silla de ruedas. Supervisar si hay cambios en textura o coloración de la piel, luego la limpieza y movilización constante del paciente, flexiones o atenciones sin causarle dolor.
Solo el servicio de Medicina Interna del hospital Sabogal recibe un promedio de 150 pacientes por diferentes patologías, 30 de ellos vienen a causa de las escaras en adultos mayores entre los 60 y 80 años.
Las principales causas de las úlceras por presión son la inmovilidad del paciente, ya que muchas veces estas personas se encuentran en situación de dependencia absoluta y postrados en una cama.
OTRO FACTOR IMPORTANTE ES LA FALTA DE HIDRATACIÓN DE LA PIEL
“La nutrición es importante, debe ser adecuada, comer proteínas que generen y regeneren la piel, carbohidratos y lípidos de manera equilibrada. Hay que revisar si hay cambios en la coloración de la piel, eso quiere decir que estamos presentando ulceras por presión, por ello hay que hacer movilizaciones constantes para evitarlas”, comentó.
Los signos y síntomas que alertan la aparición de escaras en una zona determinada del cuerpo son cambios de coloración en la piel de un tono rojizo a un tono más violáceo hasta tener coloraciones más oscuras, también puede haber aumento de volumen como un hinchamiento, incluso puede haber secreciones y presentar cambios de temperatura.
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Es importante el uso adecuado de ropa que permita su movilización y no les produzca fricción., el uso de cremas hidratantes también es importante. Se sugiere además el cambio constante de posición de los pacientes que sufren de escaras.
“Es importante el cambio de lugar y ayudarlo con almohadas para que la presión del cuerpo y pierna no toque otra extremidad que pueda provocarle lesiones. Las sabanas y almohadas deben estar bien alisados porque esas grietas hacen que se adhiera y sea susceptible a lesiones” acotó.
QUÉ ES UNA ESCARA
Una escara es una herida en la piel que se produce cuando se expone a presión, roce o abrasión por deslizamiento y como consecuencia las células afectadas terminan muriendo. También se conocen como úlceras por presión y generalmente aparecen en personas con movilidad reducida o que están encamadas por un tiempo prolongado. La permanencia en una misma postura durante demasiado tiempo puede producir escaras sobre todo en zonas con prominencias óseas como son los talones, las rodillas, las caderas o la parte inferior de la espalda.
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