A cerca de dos meses de la elección de Robert Prevost como papa León XIV, la prestigiosa revista Time le dedica su portada y un extenso especial, acompañado de fotos históricas, donde resalta aspectos importantes del jefe de la Iglesia católica, desde su formación como parte de una familia católica estadounidense, su valioso trabajo en Perú y otros aspectos de su vida.


Time empieza su artículo que era casi imposible la elección de una papa estadounidense en un futuro próximo. "Los estadounidenses eran demasiado dominantes en otros lugares, demasiado ruidosos, demasiado confiados, demasiado codiciosos, demasiado obsesionados con las libertades individuales. Veneraban lo nuevo y lo brillante, prefiriendo las religiones novedosas y locales a las tradiciones de Europa o Asia", subraya.


Sin embargo, agrega que si alguna vez habría un papa de ese país este tendría que venir del Medio Oeste, el lugar donde nació y vivió sus primeros años Robert Prevost. El extenso artículo titulado 'The Making of the Pope' inicia con el enfoque a John Prevost, hermano del Sumo Pontífice católico, de cómo cambió radicalmente su vida desde mayo y ahora todos lo buscan para llegar al Papa.

En seguida continúa con los primeros años de Robert Prevost en un suburbio ubicado al sur de Chicago, su formación en San Agustín, un colegio católico en Michigan, y ya desde esos años mostraba su vocación por la labor pastoral que terminó abrazando al estudiar en la Unión Teológica Católica (CTU) donde se formó con sacerdote diocesano.

Primeros contactos con Perú


A fines de la década de 1970 conoció a Daniel Turley, quien luego llegó a convertirse en obispo de Chulucanas. Turley lo recuerda como una persona particularmente comprometida con la idea de la obra misionera. En general, los agustinos se consideran una orden misionera que enseña y predica.


“Estaba muy interesado en lo que hacía en Perú”, dice Turley, quien trabajó allí durante 52 años. Mientras otros estudiantes se dirigían a sus habitaciones a estudiar, Prevost quería hablar sobre las necesidades de la gente de la diócesis de Turley. “De todos ellos, él era el que tenía mayor compromiso con la comunidad”, afirmó.

Llegada a Chulucanas


En 1983 arriba a Perú para convertirse en secretario personal del obispo en Chulucanas, en Piura. Su llegada ocurrió cuando el norte del país era castigado por uno de los eventos del Fenómeno El Niño que más daños causó y se puso a trabajar ayudando a reconstruir la región.


Si bien el Papa León debe su educación formal casi exclusivamente al hemisferio norte, gran parte de su formación como misionero tuvo lugar en Perú. "Esas son las experiencias de vida que te dan vida para seguir adelante, que te nutren", dice Turley, quien era el superior de Prevost cuando llegó. Como sacerdote joven, vivir esa experiencia y ver lo hermoso que es, lo pobre que puede ser la gente, y aun así, toda la bondad y el poder de la unión, y las cosas maravillosas que pueden lograr si se empiezan a romper prejuicios y divisiones. Prevost lo dijo en St. Jude's: "La parte del ministerio que más me ha marcado es Perú", cita la revista Time.

Después de varios años como jefe de la Iglesia Católica en Chicago y en el Vaticano regresa al Perú a fines de 2014 para asumir la Diócesis de Chiclayo nombrado por el papa Francisco y rápidamente se ganó el cariño de la gente "que quería a alguien abierto y acogedor".


Los desafíos no provenían solo del interior de la Iglesia. “Inmediatamente después de su nombramiento como obispo, tuvimos el tremendo problema de Venezuela”, dice Turley, quien supervisó la respuesta de la Iglesia Católica a los 1,5 millones de solicitantes de asilo aceptados en Perú después del colapso de la economía y la sociedad civil venezolanas en 2014. Necesitaban vivienda, trabajo y asistencia médica. “Uno de los mejores obispos con quienes trabajar en el trato con migrantes fue nada menos que el obispo Robert Prevost”, dice Turley. “Su diócesis estaba muy bien organizada para atenderlos”.

Luego, en 2023, Prevost fue nombrado cardenal y regresó a la Ciudad del Vaticano, donde desempeñó funciones cada vez más importantes hasta el anuncio de su elección en mayo.


"Se formó en una iglesia progresista, con una visión misionera y una visión global, y, especialmente en Perú, profundamente influenciado por su acompañamiento a los más pobres", afirma la hermana Barbara Reid, actual presidenta de la CTU. "Se percibe en todo lo que dice", subraya.

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(FIN) MAO

Publicado: 1/7/2025