El gobierno ruso ha visto con buenos ojos que Estados Unidos frenara el envío de ayuda de algunas armas clave para Ucrania, luego que el Pentágono considerara «demasiado bajas», las reservas militares de Estados Unidos, lo que lo llevó a suspender el envío de armamento previamente comprometido con Ucrania.

“Esta decisión se tomó para anteponer los intereses de Estados Unidos tras una revisión por parte del Departamento de Defensa del apoyo y la asistencia militar de nuestro país a otros países de todo el mundo” declaró la Vicesecretaria de Prensa de la Casa Blanca, Anna Kelly.

Cuantas menos armas se le envíen a Ucrania, más cerca estará el fin de la operación militar especial«, dijo a la prensa el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, respondiendo a una pregunta de AFP y usando la fórmula habitual en Moscú para referirse a la ofensiva en el país vecino.

 

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El anuncio se realizó en un contexto particularmente delicado, ya que Rusia lleva a cabo una de las ofensivas más intensas sobre suelo ucraniano desde que inició el conflicto hace más de tres años.

Desde Kiev, una fuente de la Presidencia indicó que el gobierno de Volodímir Zelenski busca precisar con Washington el alcance exacto de lo que la Casa Blanca entiende por la suspensión en el envío de material de Defensa.

«Estamos aclarando la situación. Creo que todo quedará claro en los próximos días», dijo a la prensa el asesor presidencial Dmitro Litvin.