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Otro cambio importante es la posibilidad de que los candidatos a la presidencia o vicepresidencia

El Congreso peruano ha dado un paso histórico al restaurar la bicameralidad en el país, reintroduciendo un Senado después de más de tres décadas desde el autogolpe de Alberto Fujimori. La publicación de la Ley N.º 31988 marca un hito en la evolución política del Perú y establece una serie de cambios significativos que afectarán las próximas elecciones presidenciales.

Las 53 reformas constitucionales llevadas a cabo afectan una variedad de artículos de la carta magna de 1993, allanando el camino para la implementación de un nuevo sistema legislativo y electoral. Estas reformas entrarán en vigor a partir de las elecciones generales de 2026, lo que implica un cambio radical en el proceso electoral peruano.

Una de las modificaciones más destacadas es la instauración de un Senado y una cámara de diputados. En las próximas elecciones, los peruanos elegirán a 130 diputados y 60 senadores, marcando un cambio significativo en la estructura del Congreso. Además, se permite la reelección inmediata de los representantes en ambos cuerpos legislativos, siempre y cuando sea para el mismo cargo.

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Otro cambio importante es la posibilidad de que los candidatos a la presidencia o vicepresidencia también puedan postularse como senadores o diputados simultáneamente. Además, se han establecido nuevos requisitos para los candidatos, incluidos funcionarios de alto rango que deben renunciar a sus cargos seis meses antes de postularse.

En términos de requisitos para convertirse en senador o diputado, se han establecido criterios claros, como la edad mínima y la nacionalidad peruana. Estos requisitos buscan garantizar la idoneidad de los candidatos y promover la representación democrática en el Congreso.

Además de los cambios en la estructura del Congreso, se han realizado modificaciones en la presidencia del poder Legislativo y en los procedimientos de destitución de funcionarios públicos. Estos cambios están diseñados para fortalecer la separación de poderes y garantizar la rendición de cuentas en el gobierno.

Las reformas constitucionales en Perú marcan un momento crucial en la historia política del país y tienen el potencial de transformar el sistema político en su totalidad. Con cambios significativos en la estructura del Congreso y los procedimientos electorales, el futuro político de Perú está en proceso de redefinición.