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La  movilización y la exigencia de acciones concretas

La preocupación por la contaminación por metales pesados ha alcanzado un nuevo nivel en el Perú, con miles de ciudadanos de diversas regiones del país manifestándose para exigir acciones concretas frente a esta problemática que afecta tanto la salud humana como el medio ambiente.

El jueves pasado, grupos de ciudadanos se congregaron frente al Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) para expresar su preocupación y exigir una mayor atención sanitaria y asignación de recursos para abordar esta situación. Se estima que actualmente, 3 de cada 10 peruanos, más de 10 millones de personas en total, están expuestas a los riesgos derivados de la contaminación por metales pesados.

La plataforma nacional de los afectados por metales y otras sustancias tóxicas ha sido clave en la movilización, convocando a ciudadanos de 14 regiones del país para visibilizar los impactos tanto en la salud física como mental que esta problemática conlleva.

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La demanda central de estos ciudadanos es clara: la implementación de medidas efectivas contra la contaminación generada por las actividades extractivas, principalmente a cargo de las grandes mineras transnacionales. Buscan el reconocimiento y la actuación por parte de las autoridades, así como apoyo médico especializado y financiamiento para mitigar los daños ya causados.

A pesar de la aprobación de la Ley N.º 31189 en mayo de 2023, diseñada para abordar y mitigar los problemas de salud derivados de la contaminación por metales pesados, los afectados aún no ven los avances prometidos por el Poder Ejecutivo en cuanto a tratamiento médico y atención integral.

Esta ley se enfoca en salvaguardar los derechos a una salud adecuada y a vivir en un ambiente libre de contaminación, fortaleciendo los procesos de prevención y atención médica para aquellos afectados por este grave problema ambiental y de salud pública. Sin embargo, su implementación requiere una colaboración multisectorial y una participación ciudadana activa.

La contaminación por metales pesados sigue siendo una grave preocupación en el Perú, y los afectados continúan luchando por una respuesta efectiva y una atención adecuada por parte de las autoridades. La movilización y la exigencia de acciones concretas son fundamentales para abordar esta problemática de manera integral y proteger la salud de la población y el medio ambiente.