En un reciente estudio el doctor en geofísica Steven Emerman – presidente del subcomité de conocimientos, comité de presas de EEUU- ha sido enfático en recomendar que el proyecto minero Ariana debe ser rechazado “sin mayor consideración”, ya que si la presa de Ariana colapsa, los relaves fluirían inmediatamente hacia la bocatoma de agua del Túnel Trasandino, a los canales colectores, al Río Carispaccha y siguiendo su curso podrían afectar incluso los pueblos de Corpacancha, Santa Ana, Sincamachay y la planta hidroeléctrica Malpaso.

En la presentación pública del informe, Emerman sostuvo además, que no conoce un caso de explotación minera parecido en el mundo, que implique la construcción de una presa de relaves en una zona de suministro de agua para una ciudad capital de un país.