Super Mensajes

El cuerpo perfecto se paga y eso, ahora, lo sabe y reconoce María Conchita Alonso, quien declaró que prefiere morirse a volver a operarse para retirarse los biopolímeros de su interior.

En una reciente entrevista con el programa ‘De primera mano’, la cantante explicó por qué canceló sus últimos conciertos en México luego de una cirugía invasiva que se practicó para aliviar su dolor.

MIRA: OMS alerta que uso excesivo de antibióticos durante la pandemia aumentó la resistencia a microbios

“Luego de la primera intervención dije: ‘Si necesito otra más, prefiero morirme’, así de invasiva y fuerte fue. Gracias a Dios, me sacaron el 90% y, con el resto, ya no hay problema”, reveló la venezolana.

En seguida, María Conchita Alonso confesó que fue tajante con su doctor al exigirle que “si me hace falta una transfusión de sangre, déjame morir porque yo no sé de dónde viene y mi sangre es pura”.

Estas reacciones se deben a que la intérprete de ‘Acaríciame’, según relató, comenzó a presentar un fuerte dolor en los glúteos (donde se inyectó los biopolímeros) y, sobre todo, en las articulaciones.

“No puedo mover bien el brazo, ni abrazar a la gente. No puedo tocar la guitarra. No puedo bailar”, contó con voz entrecortada y sollozando la popular cantante, quien todavía atraviesa por terapia.

María Conchita Alonso se arrepiente de inyectarse biopolímeros

María Conchita Alonso no puede moverse ni mucho menos cantar, bailar, tocar su guitarra u ofrecer shows, todo porque en 2008 fue convencida por una supuesta amiga de mejorar su imagen y volverse más sensual.

“Un día, una compañera del colegio me dice: ‘Te quiero poner unas cosas en las pompis’, y a mí no me hacía falta porque ya las tenía grandes, pero me dijo que era para levantármelas y me convenció”, explicó la venezolana.

Luego, “pasaron los años y empecé a sentir molestias al estar acostada o sentada. Empiezo a preguntar y me dicen que, en Estados Unidos, es ilegal que te inyectes biopolímeros”. A partir de esa información, la artista siguió.

“Vine a México para reunirme con un doctor y, cuando me revisa, me dice: ‘Hay que quitártelo, porque eso ha matado a mucha gente. El biopolímero va bajando y se va metiendo a los órganos”, confesó Conchita Alonso.

Por ello, la intérprete de ‘Hazme sentir’ se sometió de urgencia a una cirugía invasiva, para retirarse de su cuerpo el máximo posible de macromoléculas sintéticas derivadas del petróleo o, sobre todo, de la silicona.

“Seis semanas durmiendo boca abajo y sin sentarme. Te cortan. Tengo una cicatriz de esquina a esquina y es como un corazón. Te abren y te ponen unos drenajes. Yo no quiero que mujeres pasen por esto”, finalizó.

Perú21 ePaper, ingresa aquí y pruébalo gratis.