![[Opinión] Ariel Segal: Ucrania relegada](https://peru21.pe/resizer/4oXn7gCxayoOqxP41qqv2tsjDMM=/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/FQNUMD6RK5HY5G54VOSW7PN254.jpg "[Opinión] Ariel Segal: Ucrania relegada")
En medio de la atención mundial centrada en el conflicto en Gaza, provocado por los trágicos eventos del 7 de octubre perpetrados por terroristas de Hamás en territorio israelí, la guerra en Ucrania parece relegada al olvido mediático. A pesar de que han pasado más de un año y medio desde la invasión de las tropas rusas, no se observan avances significativos para ninguna de las fuerzas combatientes.
En contraste con el constante escrutinio que enfrenta Israel en el conflicto del Medio Oriente, donde las críticas sobre la proporcionalidad y dimensión de los ataques a Gaza son moneda corriente, la situación en Ucrania no ha suscitado la misma solidaridad a nivel mundial. ¿A qué se debe esta desproporción en la atención mediática? Aparentemente, el presidente ruso Vladimir Putin cuenta con simpatías tanto de la izquierda como de la derecha radical a nivel global. Esta situación lo hace no solo inmune a la crítica, sino un aliado inquebrantable de regímenes como los de Cuba, Venezuela y Bolivia, así como de gobiernos de ultraderecha como Hungría o Serbia, así como de grupos antisemitas y fascistas europeos, incluida la organización paramilitar Wagner, que son recibidos en Rusia si comparten los designios imperialistas del presidente.
En Ucrania, los bombardeos contra objetivos civiles se intensifican, y dejan al país agredido sin electricidad ni combustible. En noviembre, en un solo día, la aviación y misiles rusos bombardearon 120 lugares en un periodo de 24 horas, y, aun así, son pocos los medios que prestan atención a este conflicto.
El Congreso de Estados Unidos aún no ha aprobado el más reciente paquete de ayuda de seguridad de 61 mil millones de dólares para Ucrania, ya que la mayoría republicana del Senado muestra resistencia a incurrir en más gastos para apoyar la resistencia del país. Si Trump es reelegido como presidente en noviembre del próximo año, es probable que Ucrania se vea forzada a firmar un acuerdo de paz que beneficie a Putin, el gran ganador, junto al régimen iraní, de lo que sucede en Gaza.
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