A casi 32 años de la explosión de dos coche-bombas en el corazón de Miraflores, dos miembros de la cúpula senderista buscan con ansias salir en libertad. Se trata de Margot Liendo Gil y Osmán Morote Barrionuevo —este último llegó a ser considerado el número dos de la organización terrorista—, quienes fueron sentenciados a cadena perpetua por el ataque de Tarata en 1992, que dejó 25 muertos y 155 heridos.
Los terroristas han solicitado su excarcelación y la última decisión la tendrá la Primera Sala Penal Superior Nacional Liquidadora Transitoria, que deberá resolver el pedido de libertad de ambos entre hoy y mañana.
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La defensa de Morote y Liendo sostiene que ambos están en el derecho de exigir su excarcelación pues ya cumplieron 35 años en prisión —periodo establecido en el artículo 66 del Código de Ejecución Penal para que sentenciados a cadena perpetua puedan solicitar al Poder Judicial la revisión de su pena.
Sin embargo, lo que no se menciona es que los senderistas purgaron 35 años tras las rejas por otros hechos distintos al caso Tarata; 25 de estos años fueron por el delito de terrorismo.
RECHAZAN PEDIDO
Tanto la Procuraduría como la Fiscalía Especializada en Delitos de Terrorismo han solicitado que la revisión de cadena perpetua se declare improcedente y se mantenga a Osmán Morote y Margot Liendo en la cárcel.
El procurador Milko Ruiz le explicó a este diario que ambos fueron condenados por el atentado en Miraflores en septiembre de 2018. Es decir, no han pasado los 35 años requeridos por el Código de Ejecución Penal para que un reo solicite su libertad. “Por ello, realizando el cómputo desde la fecha que estuvieron privados de libertad en el presente proceso penal, han transcurrido solo 10 años y 9 meses aproximadamente de privación de libertad producto de la pena de cadena perpetua impuesta; por ende, no se cumple el requisito indispensable para que se pueda acceder a la revisión de cadena perpetua”, sostuvo Ruiz.
Perú21 también pudo conocer que los sentenciados tampoco han cumplido con el pago total o parcial de la reparación civil ni con el pago de los días multa fijados en su sentencia —otro de los requisitos para solicitar una revisión de la pena. Los imputados tampoco cuentan con los informes sociológico y social, necesarios para poder evaluar su evolución en los centros penitenciarios. Está en manos del Poder Judicial no acoger estas maniobras de quienes causaron miles de muertos al país.
Están en deuda con la sociedad peruana
Yo creo que las autoridades tienen que pensar bien. La Fiscalía ha apelado esta situación. Morote todavía tiene un caso pendiente por la situación de Tarata y también la otra terrorista; entonces yo creo que la Fiscalía tiene un gran deber.
Está pendiente su deuda con la sociedad peruana. El caso es complejo, no creo que puedan salir en libertad mientras no cumplan la pena prevista. Si llegara a pasar, sería una situación peligrosa para el Perú.
Además, (Morote) no es cualquier persona. Estamos hablando del número dos. Hay que tener mucho cuidado con cómo lo van a tratar. Este tema sería una situación muy peligrosa para la sociedad peruana.
El terrorista, especialmente el que perteneció a Sendero Luminoso, nunca va a cambiar, tiene en el ADN el pensamiento Gonzalo, que es tomar el poder por las armas. Van a cambiar de pelaje, como Movadef, pero siempre van a buscar una situación de tomar el poder para implantar en el Perú el socialismo y llegar al comunismo.