¿Buscas un postre nutritivo, rico y económico? ¡Este helado es lo que estás buscando!

Además de aprovechar los plátanos que te quedaron de la semana, puedes variar algunos ingredientes. Por ejemplo, la mantequilla de maní puede ser crema de almendras o de avellanas, incluso con otras frutas. Prueba y diviértete.

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En las siguientes líneas te vamos a enseñar a preparar un exquisito helado en poco tiempo y con lo que tengamos a mano. ¡Atenta y toma nota!

3 plátanos maduros

3 cdas. de mantequilla de maní

¼ cdta. de extracto de vainilla

canela

sal marina

Congela el plátano en trozos pequeños, por al menos dos horas. Si tienes una procesadora, procesa el plátano hasta conseguir una mezcla cremosa (si no, usa una licuadora). Toma tiempo, pausas y acomodos de los plátanos, porque estarán duros como piedras. Una vez cremoso, agrega la mantequilla de maní, la sal y la vainilla. Puedes comerlos inmediatamente, para aprovechar esa textura cremosa. Si lo vuelves a congelar, puedes pasarlo de vuelta por la procesadora. Sirve con maní molido encima y canela en polvo.

Este helado también es muy versátil y solo lleva plátano congelado procesado.

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Si te quedaste con ganas de más, mira este vídeo y aprende otra fabulosa receta.