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La caída en el número de suscriptores y la ola de despidos en Netflixha ocasionado que sus empleados trabajen en una “cultura de miedo”, asegura un informe de Insider.

De acuerdo con el medio, el despido de cientos de trabajadores ha provocado que las decisiones se tomen con “menos franqueza” con el temor de ser el siguiente en ser despedido de la empresa.

Netflix en crisis

Netflix comunicó a sus empleados sobre el descenso en suscripciones, pero prometió mantener una cultura positiva para evitar mayores descensos.

Luego en mayo y junio llegaron los despidos. La primera ronda afectó a unos 150 empleados, luego a otros 300 en la segunda, lo que afectó a las divisiones de toda la empresa, desde los equipos de cine, televisión y animación hasta asuntos comerciales, marketing y legal.

Según empleados, esta sensación ha calado fuertemente en la sensación interna general, provocando temor en la toma de decisiones.

"En algún momento de los últimos tres años, realmente dio un giro", dijo un ex miembro del personal de Netflix sobre el cambio cultural. "La franqueza se convirtió en una parte más pequeña de la cultura, o su poder se redujo significativamente. La gente diría que Netflix comenzó a actuar como un estudio de manera equivocada. Se volvió mucho más político".

Creatividad, pero con miedo

Insider habló con 14 personas, en su mayoría ex empleados, así como con creadores, productores y agentes de Hollywood de Netflix sobre los cambios en la empresa a medida que enfrenta nuevos vientos en contra.

Muchos describieron un entorno creativo impulsado por la toma de decisiones "basada en el miedo" y dirigido por ejecutivos con exceso de trabajo que están más dispersos que nunca, particularmente durante la pandemia.

Otros mencionaron una supervisión más estricta de los presupuestos y la preocupación de que los despidos en ciertos equipos afectaran de manera desproporcionada a las personas de color, un giro decepcionante en una empresa que se destaca en Hollywood por su equipo de liderazgo intencionalmente diverso.

"Las decisiones tardan una eternidad en tomarse, son todas reaccionarias, todas están basadas en el miedo", señaló un exejecutivo. Él sintió el cambio de manera aguda después de que el jefe de contenido de Netflix, Ted Sarandos, fuera ascendido a codirector ejecutivo junto con el cofundador Reed Hastings a mediados de 2020.

Si bien muchos showrunners y productores que trabajan con el transmisor siguen contentos, varios le han dicho a Insider que se sienten frustrados. "Creo que para todos hubo un período de pura alegría", dijo un creador que ha trabajado con Netflix durante años. "Cualquiera con experiencia sabía que iba a cambiar en algún momento, pero sucedió muy, muy rápido".

De acuerdo con la propia Netflix, a finales de junio se reportaron 220,67 millones de suscriptores frente a los 221,64 millones del primer trimestre, es decir, unos 970 mil usuarios menos. Sin embargo, para ellos no es del todo malo, ya que el director financiero, Spence Newman, había especulado que podrían perderse hasta dos millones durante dicho ciclo.

Tras brindar las cifras, Netflix ha priorizado elogiar sus contenidos existentes.

También reiteró su próximo plan para un nivel de anuncios de menor precio en asociación con Microsoft, que ahora parece estar cayendo a principios de 2023.


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