Al menos una persona falleció y 20 más resultaron heridas luego que un autobús, que se presume que llevaba a trabajadores mineros, cayera por un abismo en la región boliviana de Potosí, en el suroeste del país.
El suceso ocurrió la mañana de este miércoles cuando un autobús cayó por un barranco en la zona de Pailaviri, a la altura de Cerro Chico en la altiplánica Potosí, según información del Comando Departamental de esa región.
El vehículo al parecer sufrió desperfectos antes del accidente, por lo que se presume que la causa de este hecho fue una falla mecánica, aunque esta situación sigue en investigación.
De acuerdo con los testimonios de los vecinos que ayudaron a los heridos, la mayoría de las personas que estaban en el interior del autobús eran mineros, aunque también había mujeres y niños.
Las personas heridas fueron trasladadas hasta el hospital Daniel Bracamonte en Potosí, como también a la Caja Nacional de Salud, de acuerdo al reporte del Comando Departamental.
Heridos y más accidentes
Entre los heridos está el conductor del vehículo de 28 años, 3 mujeres y 3 menores de edad de 10 meses, 2 y 15 años, según el reporte.
Entretanto, la persona que falleció en este accidente es Zenón M.Q. de 35 años.
El vehículo quedó completamente destrozado, con los vidrios rotos y algunos de los asientos esparcidos cerca del lugar del accidente.
En la víspera también se reportó otro accidente de tránsito en el kilómetro 45, cerca a la localidad de Parotani camino a la central Cochabamba, en el que un minibús chocó con un camión de alto tonelaje.
A raíz del impacto, el conductor del minibús falleció en el lugar, según los medios locales.
Los accidentes en las carreteras bolivianas causan cada año alrededor de 1 400 muertos y unos 40 000 heridos, según datos oficiales.
¿Por qué ocurren estos accidentes?
Un informe de la Policía Boliviana advierte que la mayoría de estos sucesos se debe a "fallas humanas" que pueden prevenirse.
Unas horas antes este mismo martes, el fiscal general de EE.UU., Merrick Garland, anunció una demanda contra el estado de Idaho por considerar que su ley contra el aborto "criminaliza a los médicos" e impide que practiquen con libertad las interrupciones del embarazo cuando la salud de la mujer está en riesgo.
El Departamento de Justicia demandó a Idaho por violar la Ley federal de Trabajo y de Tratamiento Médico de Emergencia, para intentar proteger a los médicos que tienen que intervenir cuando el aborto es "el tratamiento médico necesario para estabilizar la condición médica de emergencia de una paciente".
Se trata de la primera acción del Departamento de Justicia contra un estado desde el fallo del Supremo, y no será la única, según explicó en rueda de prensa el propio Garland.
El fiscal apuntó que el grupo de trabajo sobre derechos reproductivos creado a raíz de la decisión del Supremo se está dedicando a evaluar "el panorama cambiante de las leyes estatales" y ya se están estudiando "litigios adicionales" contra otros estados.
Todo ello para "hacer todo lo posible para garantizar el acceso legal continuo a los servicios reproductivos" en estos "tiempos aterradores e inciertos para las mujeres embarazadas y sus proveedores", apuntó por su parte la fiscal general adjunta de EE.UU., Vanita Gupta.
Con la denuncia de hoy se busca poner freno a esta ley de Idaho que entra en vigor el próximo 25 de agosto e impone a los médicos la carga de probar en el juicio que no son penalmente responsables, después de ser arrestados y acusados.
(EFE)