Con el paso del tiempo en la piel, especialmente en el rostro, aparecen las líneas de expresión. Esto se debe principalmente porque la cara va perdiendo su hidratación y luminosidad. Por ello, los especialistas recomiendan incluir en tu rutina de belleza productos que te ayuden a evitar el envejecimiento prematuro.
De acuerdo a la Dra. Verónica Muchnik, dermatóloga oficial de Natura, el ácido hialurónico es el compuesto responsable de unir las moléculas de agua, aumenta la retención e hidratación en las diferentes capas de la piel y proporciona un aspecto de piel rellena.
Por tal motivo, la especialista indica que para tratar las líneas finas de expresión causadas por deshidratación es recomendable emplear productos como el nuevo Sérum Rellenador Biohidratante de Chronos que cuenta con triple ácido hialurónico al 1,5%, de diferentes pesos moleculares, activos prebiótico y fevillea.
¿Cómo combatir las líneas de expresión durante tu rutina de belleza?
Luego de limpiar y tonificar la piel del rostro, usa un súper concentrado con ácido hialurónico. Una excelente opción es un producto que cuente con triple ácido hialurónico al 1.5%, ya que ayuda a hidratar todas las capas de la piel. Utilízalo 1 vez al día, como mínimo, de 3 a 4 gotas del producto en la palma de la mano y aplícalo en el rostro, alrededor de los ojos y cuello masajeando suavemente.
¿Cuáles son los factores que causan deshidratación en la piel?
Internos
Se llaman así porque suceden dentro de las células y causan deshidratación en las diferentes capas de la piel. Pueden ser causados por una sobrecarga de sales en el medio extracelular, promoviendo el proceso de deshidratación de la piel o también por una reducción en la producción de moléculas que retienen y transportan agua tanto en la superficie de la piel como en las capas más profundas.
Externos
Están relacionados con el medio en el que se encuentra la persona y aceleran la evaporación del agua superficial de la epidermis, por ejemplo los climáticos como viento, frío, aire seco, sol o calor.
Químicos
Son causados por insumos a los que la piel se expone como jabones y algunos productos cosméticos como los que son hechos a base de alcohol, los que tienen potencial de hidrógeno (pH) alcalinos y aquellos que son irritantes.
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