Canciller peruano Javier González-Olaechea señala que el conflicto del Medio Oriente pone al mundo en alerta máxima

No descarta una guerra mundial debido a la dimensión de los ataques.

“Estoy convencido que la presidenta Dina Boluarte concluirá su mandato el 2026”, aseveró.

El canciller peruano Javier González-Olaechea expresó su preocupación por el actual conflicto en el Medio Oriente, considerando que la situación es de la mayor gravedad y que pone al mundo en alerta máxima.
Es un conflicto que ha escalado y que ha desoído muchos llamados internacionales, entre ellos los del Perú. Ahora observo un nivel de ataques y de violencia que pone al mundo en alerta máxima, recalcó en análisis realizado sobre la coyuntura internacional.
En declaraciones al diario El Comercio, González-Olaechea no descartó la posibilidad que el citado conflicto dé lugar a una guerra mundial, debido a la dimensión de los ataques, por las fuentes de dinero involucradas y porque los actores internacionales, que tienen intereses en la zona, no han demostrado voluntad para resolver pacíficamente los conflictos.
Comentó también que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha demostrado una vez más su profunda crisis. Irán, en términos generales, no es un amigo de la paz; no practica los principios de la Carta de San Francisco. En la práctica, tampoco la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Por otro lado, la respuesta de Israel parece no tener límites.
Ante una pregunta con quién está el Gobierno de Perú? ¿Con Israel o Palestina?
González-Olaechea fue enfático al señalar que el Perú está con la Carta de San Francisco y los principios del derecho internacional público y del derecho internacional humanitario.
Sobre la delicada situación que atraviesa Hamas ante ataques israelíes, manifestó que Hamas jamás le pedirá perdón a Israel.
Por ello, indicó, es necesario que el Perú y el mundo siempre condenen los actos terroristas, pero a veces observamos declaraciones que mediatizan la responsabilidad de Hamas. Es una suerte de doble estándar. El mundo de hoy ya no aguanta más la escopeta de dos cañones ni el lenguaje ambiguo. Aseguró que bajo su conducción la Cancillería siempre actuará con los principios de la verdad y sin ocultar los hechos.
Luego al ser consultado sobre la posibilidad que el primer ministro de Israel pida perdón al pueblo palestino, respondió que, conociendo la historia de Netanyahu, ve con mucha dificultad que eso se produzca.

FORO APEC

Acerca de APEC (Foro de Cooperación Economica de Asia-Pacífico) programado para noviembre de este año en el Perú, el Canciller sostuvo que es un gran reto. “Nosotros habíamos estimado unos 10.000 participantes. Puedo afirmar que la tendencia en las últimas reuniones nos hace pensar que vamos a tener 13.000”.

Algunos amigos latinoamericanos tendrán sorpresas. El país anfitrión puede invitar hasta cuatro países. Estamos en pleno proceso de selección, pensando qué países nos interesa que estén presentes en calidad de invitados, porque tienen unas buenas relaciones con el Perú históricamente y, quizá, uno extracontinental.

Esa decisión se tomará en un mes.

Respecto a posibles invitados afirmó que el presidente
Milei es una posibilidad que el presidente Lula también puede ser uno.

Respecto, a los países que no practican un lenguaje diplomático correcto no son muy apreciados en Torre Tagle.

Por más que se discrepe, uno no puede ir insultando. Ahora, en América Latina cualquiera dice “ladrón”, “corrupto”, “narco”. La presidenta Boluarte no contesta.

La cancillería peruana jamás va a expresarse en esos términos. Si desde la cancillería de cualquier país se siguen tolerando los insultos y las bajezas, ¿a dónde vamos a llegar?, se preguntó.

En cuanto a la posición internacional del gobierno peruano, dijo que se puede medir de distintas formas. En los últimos meses, en los foros en los que he participado, más del 70% u 80% de los encuentros bilaterales le han sido solicitados al Perú con anterioridad por países o contrapartes importantes.

En el congreso internacional de Seguridad de Múnich, prácticamente la agenda se llenó por las demandas. Se han recibido siete invitaciones de países importantes para que la presidenta visite.

En la cancillería procuramos viajes que se tengan agendas sustantivas con acuerdos, con carne.

Dio a conocer también que después de varios decenios visita Lima el canciller de Suiza, nada menos. Es una potencia, desde el punto de vista de la civilización, con un componente muy fuerte en cooperación técnica y personal.

En el sector privado próximamente vendrán los directivos principales de Google porque nos interesa mucho la transformación digital que estamos impulsando y los efectos de poder ofrecer mayor cobertura a las poblaciones más alejadas.

En cuanto a las visas exigidas por México, respondió que el canciller del Perú no actúa con la cabeza caliente. La primera respuesta siempre tiene que ser aplicada bajo el principio de reciprocidad.

Después se evalúa porque también hay un frente interno donde te pueden decir que no se tienes carácter, después correspondía analizar cuál era el interés del Perú: obviamente seguir fomentando el turismo, no perjudicar a nuestros productores y hoteleros, entre otros.

El canciller no sabe si el gobierno mexicano retrocederá en la medida. En todo caso, sería sano rectificar. Sería mirar las relaciones peruanas y mexicanas con una perspectiva histórica.

DINA BOLUARTE

Finalmente, puntualizó que está convencido que la presidenta Dina Boluarte terminará el mandato constitucional en 2026 y que eso es lo mejor para el país porque el Perú se tiene que acostumbrar a que las reglas democráticas se respeten. Los gobiernos se equivocan, los ministros nos equivocamos. Pero una de las formas adicionales, convergentes para fortalecer nuestra democracia es que la institucionalidad se fortalezca. Y también que los electores sepan votar, reiteró.