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Tras el Megaoperativo de Control en la región Junín, la Contraloría detectó un perjuicio económico de S/ 9’986,794 en contra del Estado, debido a que seis funcionarios regionales pagaron por equipos médicos no adquiridos ni recibidos para el hospital de Pichanaki, ubicado en la provincia de Chanchamayo.

El informe de auditoría revela que el supervisor de obra, el coordinador de obra, los subgerentes de Supervisión y Liquidación de obras, así como el gerente regional de Infraestructura, permitieron el pago de 7 valorizaciones por los equipos biomédico, electromecánicos, instrumental, informático, mobiliario clínico y mobiliario administrativo, sin haberlo almacenado.

Igualmente, los funcionarios no exigieron cumplir los términos contractuales, así como las obligaciones laborales para garantizar y, por ende, confirmar la compra del equipamiento médico que nunca se dio.

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El supervisor de la obra dio conformidad a la adquisición de los equipos médicos basado en información de las fichas técnicas sin haber verificado in situ los equipos.

La comisión de control, igualmente, comprobó que el contratista quiso acreditar el sustento de la compra de los equipos médicos con facturas a favor de un consorcio distinto y no de la empresa que ejecutaba la construcción y el equipamiento del hospital de Pichanaki, según la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat).

El informe fue enviado a la Procuraduría Pública encargada de los asuntos judiciales de la Contraloría General para el inicio de las acciones legales contra los involucrados. Y recomendó al gobernador de Junín, el deslinde de las presuntas responsabilidades administrativas.

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