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Las terribles horas de Dina

En apenas 48 horas, la presidenta Dina Boluarte pasó de decir que tiene las manos limpias y que no le ha robado ni un sol al Perú, al silencio absoluto. Quien ha salido a responder, sin mayor detalle, sobre las nuevas denuncias en contra de Boluarte, ha sido el primer ministro Gustavo Adrianzén. Asegura que no hay desbalance en sus cuentas y que el auto de 26 mil dólares que compró en efectivo lo hizo con sus ahorros. Sobre el cuaderno de registros perdido y el posible encuentro con Vladimir Cerrón, solo quedaron más dudas.

“(...)Nosotros sabemos que nuestro hermano mayor, Jesús, nos dijo siempre que habláramos con la verdad, y ante el Ministerio Público que, por cierto ya me notificó, ya apersoné a mis abogados, estaré como siempre diciendo la verdad. No solo al Ministerio Público sino al Perú, en general”, dijo el viernes por la tarde la presidenta Dina Boluarte.

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Las terribles horas de Dina

El viernes en un breve discurso, la presidenta Dina Boluarte intentó deslindar, sin dar mayores detalles, de las denuncias que en los últimos días la han llevado a estar en la mira de la fiscalía. Boluarte está siendo investigada por la presunta comisión del delito de enriquecimiento ilícito y omisión de consignar la declaración en documentos, por el uso de costosos relojes Rolex.

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Las terribles horas de Dina

Un reportaje de La Encerrona reveló la semana pasada que desde que Boluarte asumió como vicepresidenta y ministra de Inclusión Social del expresidente Pedro Castillo, usó más de una docena de relojes de diversas marcas, incluido el Rolex, cuyo valor en Perú alcanza los 14.000 dólares. Entonces, Boluarte dijo que el costoso reloj era un “artículo de antaño” y que todo lo que tenía era fruto de su esfuerzo. Sin embargo, el viernes solo atinó a decir que se irá de Palacio de Gobierno “con las manos limpias”.

“A ustedes les digo, cuando empecé a asumir la responsabilidad como primera mujer Presidenta de la República en 200 años de nuestra historia, les prometí trabajar con las manos limpias. Aquel 7 de diciembre del 2022, entré por la puerta grande y me iré por la misma puerta el 28 de julio del 2026, siempre, siempre con las manos limpias”, aseguró.

Con una aparente serenidad, Boluarte aseguró que no le teme a los pedidos de vacancia que se preparan desde el Congreso y afirmó que ya el Contralor de la República ha señalado que no tienen ningún desbalance patrimonial, por lo que irá a decir “la verdad de los hechos” ante la fiscalía. Además, dijo que no le había robado un solo sol al país.

“Esta presidenta no le está robando un solo sol al pueblo peruano, sin mentirle (...) esta es mi línea de conducta, es mi línea de trabajo y como presidenta siempre diré la verdad”, afirmó.

Sin embargo, en apenas 48 horas, la situación de la presidenta ha terminado complicándose más.

Su escudero

En una aparición atípica, que lo mostraba más como un defensor legal de la presidenta Dina Boluarte, el primer ministro Gustavo Adrianzén hizo  un pronunciamiento la noche del domingo para intentar aclarar las nuevas denuncias que aparecieron contra la mandataria.

Lo primero que intentó esclarecer Adrianzén fue lo revelado por el diario El Comercio. Según un informe de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS),entre el 2016 y el 2022, la presidenta Dina Boluarte habría recibido en sus cuentas más de un millón de soles de origen desconocido.

De las 11 cuentas bancarias que Boluarte tiene a su nombre, 4 de ellas están mancomunadas. Entre ellas, está la que compartía con Néstor Amado Camargo,  quien era el ex secretario de economía del Club Departamental Apurímac, al que también perteneció la presidenta. En esa cuenta recibió casi S/. 900 mil en transferencias. Este dinero no fue declarado por Boluarte ante el Jurado Nacional de Elecciones en el 2018. Entre el 2016 y el 2020, el club departamental declaró ingresos no mayores a los S/. 100 mil.  Algo no cuadra, pero para el primer ministro Adrianzén esta denuncia no debería generar alarma.

“Respecto a las cuentas del club departamental Apurímac, debo de informar que no tiene por qué llamar la atención que se trata de una cuenta mancomunada. Esta es una práctica común en ese tipo de asociaciones civiles sin fines de lucro, que por razones de organizaciones, administrativas e incluso por razones de seguridad esas cuentas se mancomunan entre el presidente y el tesorero u otras personas que designe la asociación”, dijo.

El jefe del Consejo de Ministros nos invitó, incluso, a hacer un ejercicio matemático para resolver las dudas.

“Los invito a realizar un simple ejercicio aritmético con el cual podrán comprobar que en el supuesto que la cifra referida sea exacta eso no representa en un periodo de 7 años más que 10 mil soles, 10 mil soles mensuales. Si aquello se tiene en cuenta que sirve como un mínimo ingreso para atender gastos corrientes de la entidad como es un club departamental”, aseveró.

El reportaje también reveló que en el 2018, la presidenta Dina Boluarte pagó US$25.990 al contado por una camioneta. Dice el primer ministro que la presidenta compró ese vehículo con los ahorros familiares y cuando era una ciudadana que no ejercía función de representación alguna.

“Respecto al vehículo que se hace referencia en la nota periodística publicada el día de hoy en un medio de comunicación escrito, este fue adquirido en el año 2019 cuando la presidenta era una ciudadana que no ejercía función de representación alguna. Si bien ese vehículo fue adquirido al contado, es fácil comprobar, que por el monto este fue adquirido íntegramente por los ahorros familiares de la época”, dijo.

Otro reportaje periodístico de Punto Final reveló una fotografía que muestra el automóvil marca Lexus que está asignado a la presidenta Dina Boluarte estacionado apenas a unos metros de un condominio en Asia, al sur de Lima. Según la policía, en este lugar estuvo escondido hace algunas semanas el secretario general de Perú Libre, el prófugo Vladimir Cerrón.

La placa de identificación del Lexus EGR-844 está registrada a nombre del Despacho Presidencial. Al lado de dicho vehículo oficial, se encontró también una camioneta Volkswagen con placa EPF-852 y cuyo titular es el Ministerio del Interior. A la presidenta se le vio el pasado lunes bajar de ese  mismo vehículo cuando acudió a un estudio de abogados.

Al respecto, Adrianzén dijo que la presidenta está obligada a utilizar vehículos oficiales para trasladarse a actividades oficiales o personales. El primer ministro no negó que la presidenta Boluarte haya visitado el condominio donde habría estado Cerrón.

“Compatriotas la señora presidenta es la única funcionaria pública que está obligada como jefa de Estado por su seguridad personal a trasladarse en vehículos oficiales para realizar todas y cada una de sus actividades sean oficiales o de carácter personal”, aseguró.

Y para terminar de cerrar el fin de semana de crisis, otro reportaje informó que el cuaderno de ocurrencias que registra las visitas que recibe en su vivienda la presidenta Dina Boluarte desapareció de manera sorpresiva. Según Panorama, el cuaderno de registro se perdió la mañana del último viernes 15 de marzo. Pero lo más increíble es que  fue encontrado dos horas después por un agente asignado a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) en las inmediaciones de la Avenida Paseo de la República.

Según el reportaje, en varias páginas del cuaderno aparece el nombre del hermano de la mandataria, Nicanor Boluarte, investigado por la presunta comisión de delitos de corrupción. Los 12 agentes de seguridad presidencial involucrados fueron relevados de sus puestos.

De este tema también habló Adrianzén:

El primer ministro cerró su mensaje apelando a la reflexión y pidiendo que se recuerde que la presidenta Dina Boluarte goza de una protección constitucional excepcional que “debería tomarse en cuenta en todo momento”.

Mientras tanto, la mandataria inició la semana en silencio. A su vivienda, más resguardada que de costumbre,  llegaron los medios de comunicación para pedir respuestas más claras que las que dejó su primer ministro. Sin embargo, no dio ni la hora.