Super Mensajes

La Comisión Europea ha propuesto prohibir que las marcas añadan en las etiquetas de sus productos cualquier elemento que refiera a responsabilidad ecológica, ya sean aspectos sustentables u otras referencias. Las únicas empresas que podrán añadir esas exclamaciones serán las que obtengan la certificación de que cumplen con los criterios de sustentabilidad adecuados, por parte de una organización independiente.

La directiva del organismo habló sobre ello en una rueda de prensa. “Queremos, en primer lugar, que los consumidores obtengan información confiable, que sea consistente y verificable”, comentó Virginijus Sinkevičius, el comisario europeo de medio ambiente. El objetivo es evitar que las empresas se aprovechen de la desinformación de los consumidores para añadir información incorrecta de sus productos.

MIRA: ¿Cuáles son los desafíos de las empresas que deciden apostar por la sostenibilidad?

Según los datos dados a la revista Hipertextual, se hizo un estudio por los expertos de la Comisión, se observó cerca de 150 afirmaciones ecológicas en envases y publicidad de productos, y el 53% contenía información vaga o engañosa, como expresiones vagas que no afirmaba ni negaban algún dato en particular.

Para que la nueva ley sea aprobada, necesitará la aprobación del Parlamento Europeo y el Consejo para entrar en vigor.

Las empresas que quieran entrar al proceso de verificación independiente y estampar su etiqueta verde, deben asegurar que la información sobre su compromiso sustentable será accesible, como añadiendo enlaces o códigos QR seguros para que los consumidores puedan leer y estar al tanto del producto que compren.

Las empresas que sigan con estas prácticas dudosas de greenwashing serán sancionadas mediante multas, exclusión de contratación pública y confiscación de ingresos.

Aunque hay habido muchos activistas en contra del greenwashing que creen que el proyecto no llegó a todo su potencial; puesto que no se habló en particular de las emisiones de carbono, por lo que varias empresas pueden seguir promocionando sus productos como “CO2 neutrales”.

“No existe una banana o una botella de agua de plástico ‘neutra en CO2′. Las afirmaciones de neutralidad en carbono son greenwashing, puro y simple. Es una cortina de humo”, dijo Monique Goyens, del grupo de consumidores BEUC, a la AFP. “Plantar árboles que tardarán décadas en crecer es mucho más fácil y económico, pero significativamente menos efectivo que reducir las emisiones”.

VIDEO RECOMENDADO