En verdad ya no sabemos si reírnos o no del ‘vacunagate’ que ha mostrado una vez más que la clase política y empresarial no tiene el toque de humanidad y liderazgo que necesita el Perú. La declaración de Germán Málaga, investigador principal de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH),ya linda con lo tragicómico, por decir lo menos.
CHIFITA
Málaga justificó la vacunación del dueño de un restaurante chino de prestigio, afirmando que lo hicieron porque el personal de la embajada de China ya se había cansado de comer hamburguesas. Nos parece ridículo que un profesional caiga en esas afirmaciones, y a la vez nos apena.
CRITERIO
Lo cierto es que este escándalo de las vacunas tiene para rato y parece que hay mucho hilo por tejer, ya que se debe conocer quién hizo la relación y cómo se ofrecían las vacunas. Esto no es cosa de solo una persona, así que tienen que caer los responsables de esta tremenda falta ética y profesional. Además de ya quedar ante los ojos de la población muy mal parados.
LO JURAN
Y antes que ya les den con palo, el congresista de Fuerza Popular Marcos Pichilingue informó en sus redes sociales que ni uno de los miembros de la Liga Parlamentaria de Amistad Perú-China recibió una dosis de la vacuna. Rechazó alguna insinuación sobre lo contrario.
PROMESA
Continuando con el tema de las vacunas, el candidato de Alianza para el Progreso, César Acuña, prometió algo que consideramos bien difícil. Afirma que si gana las elecciones irá país por país para comprar 70 millones de dosis y que lo haría hasta antes de fin de año. Con sinceridad vemos eso muy difícil, dado que ya muchas farmacéuticas incluso no se dan abasto con su producción.
CUENTO
Desde nuestro punto de vista y dada la lógica que vive el planeta, consideramos que lo prometido por Acuña ya linda con unas palabras al viento, ahora solo resta ver qué candidato también viene con esos ‘cuentos’ con el fin de sumar votos. Ojalá la población se dé cuenta.
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