Si damos una mirada a los programas cómicos de la televisión de hace algunos años, nos vamos a dar cuenta, sin mucho análisis y explicación, que algunas secuencias, diálogos y puestas en escena que antes nos arrancaban carcajadas, hoy nos provocan molestia, desconcierto y rechazo, pero risas, de ninguna manera.
El humor, en buena hora, no es estático, evoluciona acorde con los tiempos y la exigencia de las sociedad de ir desterrando estereotipos, que lamentablemente siempre se han visto reforzados con los contenidos que se emiten desde los medios de comunicación.
Los golpes, por ejemplo, hoy no se celebran, como tampoco los toqueteos a las actrices, los insultos disfrazados de broma y mucho menos el bullying por apariencia, color y orientación sexual. Todos estos elementos que se tomaban en cuenta para la diversión, hoy se han ido desterrando, aunque a algunos les cueste entenderlo.
Pero a pesar de los esfuerzos por cambiar, siempre aparecerá algún exceso, y precisamente eso es lo que sucedió hace algunos días en la teleserie “De vuelta al barrio”, con unas escenas en las que se presentaba a una mujer transgénero dentro de la historia.
Fue penosa su aparición en el contexto en el que se le incluía, en lugar de proponer un relato inclusivo que diera luces a los que no conocen de asuntos de identidad de género, fue todo lo contrario. Esto motivó cuestionamientos de los televidentes y hasta de los propios actores de la trama. Estela Redhead, productora de “De vuelta al barrio”, usó sus redes para ofrecer sus disculpas por el desatino, gesto que se renonoce.
“Fue una parodia de mal gusto que no tiene lugar en la actualidad, nuestra idea no era fomentar la burla y la intolerancia, sin embargo, fue exactamente lo que conseguimos”, escribió.
Y ya que hablamos de la comunidad transgénero y de contenidos televisivos, una muestra de lo que se puede hacer cuando hay creatividad, ganas y gran presupuesto es la serie “Pose”, creada y producida por Brad Falchuk y Ryan Murphy, cuya segunda temporada acaba de ser subida a Netflix.
La mayoría de sus protagonistas son mújeres tránsgénero, sus historias se mueven entre el drama, el baile, la solidaridad, la discriminacion y la esperanza. Estos tiempos exigen nuevos contenidos,se puede, cuando se quiere.