Una trabajadora de la Casa Hogar Anita Goulden de Piura denunció la distribución de alimentos vencidos desde el año 2018, los mismos que son destinados a catorce menores, entre los que figuran niños con habilidades diferentes y discapacitados.
DENUNCIA. Según detalló a Correo la trabajadora Hayve Mauricio Torres, la denuncia fue presentada el pasado 20 de octubre ante la Defensoría del Pueblo para que intervenga sobre el presunto uso de alimentos vencidos como avena, leche, entre otros; además con presencia de telas de araña y gorgojos.
A raíz de la denuncia, la Fiscalía de Familia, el Centro de Emergencia Mujer y la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) han acudido a realizar una serie de diligencias. Precisamente, esta última entidad ha inmovilizado el almacén donde se encuentran los alimentos vencidos.
“Para mí es un maltrato dar alimentos en mal estado. Por humanidad no se debe entregar a los menores: avena y leche vencida, alimentos con telas de araña y gorgojos. El hogar es un lugar de amor, pero el maltrato que reciben los menores, al no poder hablar o quejarse, es una abuso y falta de consideración al ser humanos”, dijo.
La trabajadora dijo que la casa hogar recibe una subvención mensual de una ONG sin fines de lucro de Londres, que son destinados para el pago de sueldos y servicios, ante ello, piden un mejor trato en el tema de la alimentación para los menores.