Especialistas del Seguro Social de Salud (EsSalud) advierten que los jóvenes suelen sufrir luxaciones de rótula o patela, sobre todo los deportistas de fines de semana, por no hacer un precalentamiento antes de realizar actividades que implican cambios bruscos de dirección y de impacto como son el fútbol y la gimnasia.
El doctor EsSalud, precalentamiento, deporte, lesiones, ejercicios médico traumatólogo del Hospital Nacional Alberto Sabogal Sologuren de EsSalud, explicó que la “patela”, más conocida como rótula, es un hueso accesorio ubicado en la parte delantera de la rodilla y sirve para trasmitir fuerza a la pierna al caminar, patear, subir escaleras.
El especialista explica que la luxación de este hueso móvil se produce cuando se sale del surco femoral al no realizar un calentamiento previo antes de hacer una rutina de ejercicios.
“Por lo general, la rótula se desliza fuera de lugar cuando la persona trata de realizar un cambio brusco y repentino de dirección, por no haber precalentado al realizar deportes o por un problema anatómico previo. Hay varios tipos de patela y varios tipos de tróclea (articulación en forma de polea) en la que la patela se mueve. Esas características hacen que en algunos casos sean más susceptible a luxación”, precisó.
Veliz Aita manifestó que las luxaciones patelares no son raras, son agudas y muy dolorosas, aunque en su mayoría las encuentran reducidas, recolocadas en su posición y rara vez las ven luxadas en el momento del accidente.
La recuperación, agregó, varía de acuerdo al caso. En las lesiones en que el ligamento se rompe y permite que la rótula se salga, suelen demorar de dos a tres semanas en recuperarse, pero cuando no hay mejoría, que es un buen porcentaje, requiere cirugía de reparación de ese ligamento de contención de la patela.
Explicó que una vez tratada la luxación de la rótula, que es considerada una emergencia, y ya recolocada en su posición, el paciente debe mantenerse en reposo y al mejorar el cuadro, hacer terapia física que no tiene un límite predeterminado y será según la evolución a la patología que tiene.
El profesional de la salud sostuvo que el calentamiento de la rodilla consiste en realizar ejercicios para aumentar la vascularización de la zona a ejercitar (movilidad articular, activación cardiovascular, estiramientos dinámicos).
El objetivo de este calentamiento es preparar al cuerpo a las cargas a las que va a ser expuesto, ya que cambios bruscos pueden generar un alto estrés en la rodilla, incrementando el riesgo de lesión.
El especialista recomienda calentar con ejercicios similares a los que se van a realizar, pero con una menor intensidad.
“Un ejemplo sería antes de salir a correr, realizar una movilidad de las articulaciones implicadas (tobillo-rodilla-cadera) y correr a una intensidad baja para aumentar la temperatura del cuerpo. Si la actividad requiriese una alta intensidad, se podrían añadir periodos cortos de intensidad progresiva”, detalló.
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(FIN) NDP/RES
Publicado: 1/7/2022